La desigualdad de género ha tomado una visibilidad pública sin igual en los últimos años. Hoy no podemos imaginar ni planificar el desarrollo del país sin pensar en la paridad como horizonte. Sin embargo, se trata de un fenómeno multidimensional y estructural que resulta especialmente desafiante para el abordaje desde la política pública.

A pesar de su relevancia actual y de su capacidad de afectar a toda la población, resulta difícil hallar mediciones que integren los distintos ámbitos de la desigualdad de género y aborden la totalidad de las jurisdicciones del país a través de un mapa federal de desafíos.

Para saldar esa deuda, hemos elaborado un Índice Subnacional de Igualdad de Género (ISIG) que releva las brechas de género existentes en el plano de las decisiones y la representación política, la educación y sus oportunidades, la salud y protección, y el trabajo e ingresos para las 24 jurisdicciones del país. Cada una de estas medidas pone en diálogo de modo sintético y agregado un conjunto de indicadores construidos para pensar la situación de cada provincia en la actualidad.

Por qué problemas comenzar a trabajar es una pregunta que intentamos contestar cuando nos propusimos producir un mapa que nos permita identificar rápidamente dónde deben colocarse urgentemente los esfuerzos de política pública.